Quince días para decir sí.
En un segundo te diré que te quiero
y el tiempo se parará sobre mí.
Pensaré que ha sido estúpido
Que no debí habértelo dicho así
y mientras el corazón se me para
me mirarás a los ojos y me dirás...
No escribiré la respuesta
Pues no lo puedo decir.
El final es cosa tuya
ahora depende entéramente de tí.
Pero si rajaré el firmamento
gritando que quiero ser amado y vivir
cada segundo de mi vida contigo
en el corazón de una perla de marfil.